La música por años ha sido vista, y de hecho lo es, como la forma de entretenimiento preferida por todos, ya que nos conecta con recuerdos, con sentimientos, con gente, nos hace revivir momentos, experiencias, entre muchas cosas más.
Esto sucede por el efecto que causa la música en nuestro cerebro siendo capaz de causar todas estas reacciones en nuestro sistema nervioso que se traducen en sensaciones que siente nuestro cuerpo y las manifiesta de una u otra forma.
Pero no se queda solo en sensaciones, la música tiene un efecto mucho más profundo en el ser humano y sobretodo en el proceso de aprendizaje, de esto vamos a aprender un poco más en este blog.
Según estudios realizados, los niños que aprenden a tocar un instrumento musical aumentan su coeficiente intelectual a hasta 7 puntos. Los niños que estudian música desarrollan su sistema de atención más rápidamente que los niños que no. Los resultados se ven en el estudio, sin importar que se estudie (Documental Mi Cerebro Musical National Geographic).
Según el Psicólogo y estudioso del tema, Howard Gardner, la música es considerada una de las inteligencias, así como lo son la inteligencia Emocional, Inteligencia Lingüística o La Inteligencia Visual-Espacial.
El área cerebral donde reside este tipo de inteligencia es el lóbulo temporal derecho, aunque existe una relación topográfica entre los hemisferios cerebrales. En pocas palabras, cuando haces o estudias música se conectan ambos hemisferios del cerebro, fortaleciendo la memoria, pero también a la lógica y a la movilidad. De hecho, esta actividad requerirá que se muevan las manos o los dedos y requerirá también coordinación y atención.
La música consigue, entonces, que se incremente la capacidad que tiene el cerebro para adaptarse y cambiar, y mejora la neuroplasticidad.
En definitiva, puede afirmarse que tocar un instrumento prepara al cerebro para poder discernir lo que es importante en un proceso complejo y en la resolución de conflictos y aplicación de la lógica.
En Madrid, España, se realizó un estudio con alumnos de distintos colegios, algunos veían clases de música de forma extracurricular o como materias en sus colegios, contra otros alumnos que no veían clases de música.
El estudio dió como resultado que el 99% de los niños que veían clases de música, o practicaban algún instrumento después de clase, aprobaron todas sus materias.
Esto es un número súper importante, ya que comprobado con estadística, se sabe que la música es un elemento que ayuda al aprendizaje de los niños, sin mencionar todo el beneficio que brinda a personas con Alzheimer y otras enfermedades de origen cerebral, donde la música es usada como terapia para recuperación de la memoria y el habla de los pacientes.
En conclusión, la música es de los bienes más preciados que tenemos como seres humanos, incluso como seres vivos, porque somos los únicos capaces de entender la melodía, armonía y rítmica, por lo tanto podemos hacer y escuchar música a diferencia de otras especies que pueden entender sólo una parte de la música, mas no logran juntar todas las piezas del rompecabezas como nosotros los seres humanos.
